Ahooro Energético En empresas y hogares concienciados con el ahorro y la eficiencia energética, la domótica e integración de equipos de producción y consumo eléctrico en un sistema central supervisado por el usuario, abre la puerta a conseguir altas tasas de rentabilidad y ahorro.

Trabas legales.

Con la coyuntura legislativa actual, en la que el vertido de electricidad producida en hogares a la red no sólo no está recompensado, sino que puede ser penalizado, es de vital importancia para los consumidores que tienen, o desean instalar equipos para producción eléctrica, tales como aerogeneradores, o paneles fotovoltaicos, controlar tanto la producción como el consumo, para amortizar de una forma eficiente las instalaciones. Si tomamos una vivienda conectada a red que instala un conjunto de paneles fotovoltaicos con el fin de reducir su factura eléctrica, es fácil comprender a simple vista, que, en el caso de familias trabajadoras, el momento de máxima producción de su instalación, coincide con el momento de menor consumo, al estar ausentes de casa. En base a este planteamiento, el período de amortización de la instalación puede hacerla poco rentable. Es fundamental que los consumidores modifiquemos nuestros hábitos de consumo para adaptarlos a los momentos en que los equipos de generación están a pleno rendimiento. Para ello es imprescindible el uso de la domótica.

La Domótica y eficiencia energética.

El papel de la domótica en la eficiencia energética debe tener dos facetas complementarias, por un lado debe monitorizar y realizar un seguimiento tanto de la producción eléctrica, como del consumo de instalaciones y electrodomésticos, que permitan a los usuarios conocer sus hábitos de consumo eléctrico, para poder planificar de una forma óptima éstos, en base a su producción. Por otra parte debe permitir al usuario programar y controlar el funcionamiento de electrodomésticos de forma autónoma y programada. De una forma práctica, la idea de la automatización en el hogar nos debe llevar a permitir que de forma autónoma y programada, la lavadora, lavavajillas y demás electrodomésticos que generan un importante consumo eléctrico, se conecten una vez la instalación de producción esté a pleno rendimiento, o incluso ir conectándolos en forma secuencial según la cantidad de electricidad producida en cada momento. Cuando no haya demanda interna de consumo, hay que desconectar el sistema de producción para evitar vertidos indeseados de electricidad a red. En el caso de instalaciones aisladas, la necesidad de sistemas de control se hace aún más crucial, en base a conseguir mayores niveles de confort. Es necesario interconectar los distintos subsistemas: fotovoltaico, baterías, aerogeneradores y en último lugar grupos electrógenos, de forma que el usuario final no llegue en ningún momento a percibir falta de electricidad. http://www.idae.es/index.php/mod.documentos/mem.descarga?file=/documentos_11187_domotica_en_su_vivienda_c7a81517.pdf